«Construir» ha sido algo que me ha acompañado durante toda mi vida. Recuerdo charlas entrañables con mi abuelo hablando sobre construir edificios, puentes, barcos, aviones, etc. De niño solía guardar cualquier cosa que me llamase la atención para ver si podría usarla en un futuro para algo. A día de hoy sigo haciéndolo y con ello he resuelto más de un problema. Es lo que tiene usar una incubadora, que como dice el refranero, «quien guarda halla» ;-).
Lo que entiendo por «construir» ha evolucionado en estos últimos años fruto de mis propias experiencias y aprendizajes, pasando de ser una actividad meramente industrial y productiva, a una actividad mucho más significativa y efectiva. Significa la oportunidad de aprender mediante la combinación de ideas, para obtener resultados con sentido e identidad diversa. Ver las cosas que hago como una oportunidad me permite sentirme y mantenerme en movimiento. Aprender es necesario porque es lo que me permite crecer, y el día que dejas de hacerlo comienzas a morir. La diversidad supone riqueza, dado que procede de las personas y sus diferencias, y el sentido proporciona el combustible necesario para mantener el rumbo. La fórmula mágica que integra todas estas ideas se llama «construir en red», y para ello hace falta un solapamiento fértil que invite a un proceso de transformación energética para experimentar la efectividad en red.
La evolución de OPTIMA LAB como comunidad de práctica y red productiva nos ha llevado a la necesidad de trabajar sobre un nuevo concepto: el branding de red. El trabajo dio comienzo en las III Jornadas que tuvieron lugar del 5 al 7 de Junio en la ciudad de Elche. Para ello contamos con la colaboración de Juanjo Brizuela, artesano experto en branding, y Pablo Ortuño, fotógrafo autor de las imágenes que puedes ver en la foto collage de este post. En las IV Jornadas que tuvieron lugar del 5 al 7 de Septiembre, esta vez en Madrid, continuamos trabajando con Juanjo Brizuela, uniéndose al proyecto, en una segunda fase, Naiara Pérez, artesana experta en internet y redes sociales. Muchas horas compartiendo experiencias, aprendizajes y conocimientos respecto a un nuevo y por tanto innovador concepto.
El branding también puede ser artesano, es decir, desarrollarlo desde un acercamiento basado en el sonido de las referencias y los hechos, en lugar que desarrollarlo desde el ruido. Además, se ha de tener siempre en mente la afirmación del maestro Eugenio Moliní: «la red es la única configuración en la que es posible brillar con luz propia al mismo tiempo que otros también lo hacen». En este sentido, Juanjo Brizuela aportó la idea de que «la marca no es la piel de la cebolla, sino que es una capa más».
Fruto de la maduración de OPTIMA LAB también ha habido alguna incorporación y alguna despedida. Concretamente a las III Jornadas se incorporó a la red Enrique Gonzalo. Su experiencia tanto en el ámbito de los recursos humanos como por ser CEO de Hightrack aporta mucha riqueza y experiencia a la red. Por otro lado la despedida de Silvestre Segarra. Ha sido todo un placer compartir viaje con él. Durante todo el tiempo que nos ha acompañado ha sido fuente de inspiración y creatividad, aportando mucho de su personalidad. Te echaremos de menos.Para terminar quisiera agradecer de corazón la implicación de todos y cada uno de los nodos que participan de esta aventura. Son muchas las conversaciones y horas de trabajo detrás del telón, y sobre todo mucho compromiso. Gracias José Miguel Bolívar por compartir tanto, Jerónimo Sánchez por tu ilusión y experiencia, Paz Garde por tu sentido de equilibrio, David Sánchez por ser capaz de centrarnos, Jesús Serrano por tus ganas, Cruz Guijarro por tus reflexiones y Enrique Gonzalo por tus feedbacks vitaminados. Deseando estoy que lleguen las V Jornadas de OPTIMA LAB que serán en Diciembre, para seguir construyendo nuestra identidad en red y muchas cosas más de forma efectiva.